Dr. Elmer Huerta (EH):
Hoy nos acompaña Laura Méndez, una paciente que quiere compartir su experiencia sobre cómo logró aliviar un problema muy común, pero poco conversado: las hemorroides. Bienvenida, Laura, gracias por estar aquí.
Laura Méndez (LM):
Gracias, doctor. Para mí es importante hablar de esto porque sé que muchas personas sufren en silencio, como me pasó a mí.
EH:
¿Podrías contarnos cómo comenzó todo?
Laura Mendez:
Claro. Después de mi segundo embarazo empecé a sentir molestias al ir al baño. Primero era solo un poco de ardor, pero con el tiempo aparecieron picazón, inflamación y hasta sangrado leve. Me daba vergüenza hablar del tema, así que lo dejé pasar… hasta que ya no pude más. Trabajar sentada se volvió muy doloroso.
EH:
Eso es más común de lo que la gente cree. Las hemorroides afectan a millones de personas, y más del 50% de los adultos las padecen en algún momento.
En primer lugar, aparecen las hemorroides internas: la mucosa del recto se inflama e hincha. La siguiente fase son las hemorroides externas. Aparecen protuberancias llenas de sangre y mucosidad que causan dolor y molestias al moverse.
¿Qué hiciste entonces?
LM:
Fui al médico. Me diagnosticaron hemorroides externas leves a moderadas y me recomendaron cambios en la dieta, tomar más agua… y usar una crema llamada Calmano para las hemorroides. La compré ese mismo día.
EH:
¿Y cómo fue tu experiencia con Calmano?
LM:
Increíble. Desde la primera aplicación sentí alivio. Era fresca, calmante, y redujo la inflamación rápido. En una semana ya podía sentarme sin dolor. La usé durante dos semanas y luego solo ocasionalmente si sentía molestias. Realmente me ayudó a recuperar mi rutina y mi bienestar.
EH:
¿Tuviste algún efecto secundario?
LM:
Ninguno. Seguí las instrucciones al pie de la letra y todo fue muy bien. También cuidé mi alimentación como me indicaron.
EH:
Es importante destacar eso: los tratamientos como Calmano pueden ser muy efectivos si se combinan con buenos hábitos de vida. No hay que tener miedo ni vergüenza: las hemorroides se pueden tratar.
LM:
Totalmente de acuerdo. Por eso estoy aquí: para que otras mujeres sepan que hay soluciones, y que se puede volver a sentirse bien. Para mí, Calmano fue una parte clave de mi recuperación.
EH:
Me alegra mucho escuchar eso. Y antes de cerrar, quiero aprovechar para dejar un mensaje muy claro:
Las hemorroides no son motivo de vergüenza. Son una condición muy común y tratable. Si estás sintiendo molestias como picazón, ardor o inflamación, actúa a tiempo.
Productos como Calmano pueden ser una excelente opción para aliviar los síntomas, siempre que se usen de forma responsable y acompañados de buenos hábitos como una alimentación rica en fibra y una buena hidratación.
No esperes a que el dolor te impida vivir tu día a día. Consulta con tu médico y considera usar Calmano si buscas una solución tópica efectiva y segura.
LM:
Gracias, doctor. Para mí fue un cambio total, y me alegra poder compartirlo.
EH:
Gracias por tu testimonio, Laura. Estoy seguro de que va a ayudar a muchas personas.